¡A los fogones!: 4 dulces con sabor a Bretaña

Esta es la versión bretona de los célebres pancakes, estas crêpes espesas que se toman con el desayuno en América del Norte. El término “kouign” significa pastel y aquí hace referencia a unas tortas gruesas y suaves que se pueden preparar con el “bilig”, la sartén tradicional utilizada para las crêpes en Bretaña. Se les añade azúcar, chocolate, mermelada o caramelo con mantequilla salada… ¡No deben confundirse con el célebre kouign amann!

Se los reconoce por su forma de tejos metálicos utilizados en los juegos tradicionales bretones. Los “Traou-Mad” (“cosas buenas”) o palets bretones, eran antaño apreciados por su riqueza nutritiva y sus larga conservación. Realizados con huevo, mantequilla y harina, gustan por su textura ligeramente crujiente, acompañados por un té o un café muy caliente. ¡Una delicia dulce para el paladar!

¿Y si hoy comieses como un chef? Es lo que te proponen Lætitia y Stéphane Cosnier, del restaurante con una estrella Michelin Côté Cuisine, en Carnac. Mientras esperas deleitarte en su local, puedes intentar preparar su receta de “Blanc-manger con horchata, frutas frescas de temporada y trigo sarraceno soplado”. La oportunidad de descubrir un producto emblemático de Bretaña: el “trigo negro” o sarraceno.

• Côté cuisine (Enlace externo)

¡Bretaña sin crêpes no sería Bretaña! Para variar de los clásicos, se les puede añadir salsa de chocolate, crema de nuez de coco y nuez de coco rallada. Gracias a la receta del Breizh Café, prepara tú mismo la masa y el relleno. Y para saborearlas “en carne y hueso” acude a uno de los establecimientos de esta cadena en París, Saint-Malo o Cancale.

• Breizh Café (Enlace externo)