Castillo de Cormatin: retroceder en el tiempo bajo el reinado de Luis XIII
¿Te apasiona la historia y la decoración? ¡Ven al Castillo de Cormatin! Verdadero tratado de las artes decorativas bajo el reinado de Luis XIII, sus fabulosas salas han sobrevivido a los siglos desde 1628, formando el conjunto mejor conservado de este periodo. El salón de la marquesa con sus techos pintados en azul lapislázuli, la sala de los espejos convertida en gabinete de curiosidades, el gabinete del marqués de una profusión sin precedentes... La magnificencia de los salones dorados lleva la marca de un siglo barroco que también se despliega en los jardines entre el laberinto de boj, la pajarera-belvedere, los parterres y las fuentes.
Castillo de Chasselas: explora los viñedos en segway
¿Nunca has montado en un segway? Es hora de probar este medio de transporte ecológico para dar un paseo por los viñedos. En el Castillo de Chasselas, entre Beaujolais y Borgoña, te llevamos a bordo de esta máquina para explorar las 12 hectáreas de viñedos de la finca. Una buena manera de conocer las especificidades del terruño: aquí se cultiva la vid Chardonnay, una de las variedades de uva más famosas del mundo. Pouilly-Fuissé y Saint-Veran son dos de las denominaciones producidas en el château.
Castillo de Saulon: ¡dormir (casi) como en casa!
Para sentirse como un príncipe o una princesa, no hay nada como una noche en un castillo donde te sientas como en casa. Papeles pintados antiguos, muebles antiguos y juegos para niños: a medio camino entre un castillo de recreo y una casa de campo, el Castillo de Saulon acaba de ser renovado con el aire de una casa familiar. A un paso de la ruta del vino de Borgoña, podrás acurrucarte en el salón-biblioteca para hojear un libro de arte, pasear por el parque entre el río y las arboledas y ver al chef hacer sus compras bajo las ventanas de la cocina, donde se extiende el huerto casero, ¡dos hectáreas de árboles frutales y verduras!
Castillo de Meursault: descubre los grandes vinos de Borgoña
Meursault es una finca de 110 parcelas, una prestigiosa denominación con 18 premier crus y tres grands crus y un castillo: ¡tres buenas razones para planificar una visita! Podemos añadir otra: la arquitectura. De estilo cisterciense (siglos XII, XIV y XVI), sus bodegas extienden sus pasillos de doble bóveda sobre 3.500 m² bajo el castillo y albergan unas 800.000 botellas. ¿Te ha abierto el apetito? En el Castillo de Clos de Vougeot, dirígete a una experiencia sensorial alrededor de los "climats". En el Castillo de Chassagne-Montrachet, descubrimos los vinos biodinámicos de Haute Couture y en el Castillo de Pommard, las añadas del Clos Marey-Monge.
Castillo Vault-de-Lugny: saborear las delicias de la tierra
Altas fortificaciones rodeadas por un foso del siglo XIII... ¡La llegada al Castillo Vault-de-Lugny es cuanto menos majestuosa! Y un buen comienzo antes de saborear los refinados platos del restaurante Louis XIII, su mesa gastronómica con estrellas. Bajo el techo abovedado de las antiguas cocinas o en el jardín en los días soleados, podrás disfrutar de las delicias de un chef inspirado en su Mauricio natal y en la región de Borgoña. Por no hablar de la literatura. Para honrar al escritor Michel Houellebecq, invitado habitual, ha creado incluso el "pressé de homard", un plato totalmente fantasioso nacido de la imaginación del novelista.
Castillo de Courban: momento pausa en el spa
¿Buscas un descanso entre dos visitas? En el Castillo de Courban, una hermosa mansión de principios del siglo XIX, refúgiate en el entorno de piedra rubia del Spa Nuxe para disfrutar de tratamientos tan refinados como los rituales de belleza de los Médicis. Un baño de burbujas y un hammam sólo para ti, empieza por relajarte en el agua antes de entregarte a las manos expertas de los terapeutas para una "Escapada Real de Relajación", por supuesto. Y natural: los productos se basan en plantas y aceites esenciales, como en los buenos tiempos de los reyes de Francia.
Castillo de Chailly: ¡juega a un golf majestuoso!
Cuando se combinan las líneas clásicas de un jardín francés con las exigencias del deporte de alto nivel, se obtiene un campo de golf excepcional. Como el del Hôtel Golf Château de Chailly, un campo de 18 hoyos diseñado por Gerry Watine y Thierry Spretcher que se desarrolla en las 75 hectáreas del dominio entre un arroyo y búnkers. Una forma de oxigenarte mientras vives la vida de un castillo: desde el hoyo 1 hasta el 18, vistas sin obstáculos del hermoso edificio del siglo XVI. Después del juego, puedes cambiar los árboles por las viejas piedras y tomar una copa en el patio interior del castillo, de estilo renacentista. ¡Deslumbrante!
Castillo de Sully: casarse, sí, pero con estilo
Las torres de las esquinas coronadas con linternones y las fachadas se reflejan en las aguas del foso centenario. Es difícil encontrar un escenario más idílico para una boda. En el Castillo de Sully, el mayor castillo renacentista del sur de Borgoña y propiedad de la duquesa de Magenta, cada rincón promete hacer de este día tan especial algo excepcional. Terraza de piedra sobre el agua, patio renacentista del siglo XVI o teatro al aire libre, ¡damos el sí enseguida para un cóctel tan elegante! ¿Boda con lluvia? Nos retiramos al salón de baile. Y cuando llega el momento de abrir el baile, los establos toman el relevo para un deslumbrante vals en el tiempo.
Cita en Borgoña
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