Artista y personalidad excepcional, la resistente Josephine Baker pasó muchos años con su "familia arcoíris" en el castillo de Milandes. Disfruta de nuestra visita guiada.
Desde sus pobres comienzos en Saint-Louis, pasando por sus días como corista en Nueva York, hasta superestrella del cabaret en París, Joséphine Baker ha vivido 1.000 vidas. Incluido una vida familiar más tranquila en Valle de Dordoña. Puede que su hogar fuera el escenario, pero su corazón pertenecía al Castillo de Milandes. La actriz se enamoró de este castillo de "La Bella Durmiente" en la década de 1930. Compró el edificio renacentista y lo transformó en la utopía que siempre había soñado. El castillo es un museo que rinde homenaje a su vida y su carrera, y ofrece a los visitantes una visión de la actriz, música, madona, espía, relaciones públicas e intérprete de la que podemos seguir la huella en el castillo y sus terrenos.
9h: Paseo por los jardines del castillo, acompañado por la "Tribu Arcoíris"
En los años 50, la superestrella internacional Joséphine Baker hizo algo sin precedentes: adoptar a 12 niños de todo el mundo para formar su "tribu arcoíris". Reuniendo a niños de Francia, Corea, Japón, Finlandia, África del Norte, Costa de Marfil, Venezuela y Colombia, su idea era demostrar al mundo que la fraternidad no es solo una utopía simple, y que puede expresarse respetando las opiniones y creencias de los demás.
Deseando mostrar a su familia como un modelo para el mundo, ella transformó el castillo en una especie de escenario donde podría ser exhibida. Joséphine difuminó las fronteras entre el espectáculo y la vida privada. Los visitantes venían a Milandes para tomar fotos con los niños, mientras Joséphine los llevaba a través del exuberante verdor del jardín o cerca de la puerta de hierro forjado.
11h: Volver a los escenarios
En muchos aspectos, Milandes ya era un museo para Joséphine mientras recorría sus pasillos. Para inmortalizar su fantástica carrera, Joséphine creó Jorama, un museo de cera. Aunque muchos originales se perdieron cuando Joséphine cedió el control de Milandes, los personajes de cera restantes representan los momentos más destacados de su vida. Hoy en día, se puede ver una estatua de Joséphine en uno de sus trajes "escandalosos" de la "Revue Nègre" frente a un telón de fondo Art Déco. Esta es la imagen de Joséphine que pasó a la posteridad: la intérprete con movimientos sensuales, la chica "it" del París de los años 20 que paseaba a su leopardo con correa. El castillo alberga hoy decenas de sus trajes y vestidos.
Visita al castillo renacentista
Aunque Joséphine fue, de lejos, la residente más famosa del castillo, la rica historia del Castillo de Milandes comenzó mucho antes del nacimiento de la célebre cantante. El palacete fue construido a finales del siglo XV por François de Caumont para su esposa, dándole un nombre que evoca su entorno bucólico (Milandes proviene de mi-landa, que significa "parmi les landes"). Más tarde, el castillo albergó a los nobles de Dordoña. Con florones y torres, gárgolas y vidrieras, es una hermosa estructura medieval sacada de las páginas de un cuento de hadas.
Los toques medievales y renacentistas están tejidos por todo el castillo y su parque, desde la fachada hasta la cetrería. Pero quizás el aspecto más notable son los vitrales, recordatorios en technicolor de la historia onírica Milandes, una faceta querida por Joséphine.
17h: Refréscate en el baño Art Déco
El amor de Joséphine por el jazz está especialmente presente en el fabuloso baño Art Déco. Decorado con hojas de oro y tachuelas negra, amueblado con lavabos y una bañera de porcelana de color jade (supuestamente diseñada para que coincida con la botella de Arpège, su perfume favorito), el deslumbrante baño Art Déco grita "Rive Gauche". Es muy fácil imaginarse a la cantante susurrando las letras de "J'ai deux amours" o "C'est lui" mientras se relaja en la gran bañera verde.
19h: Volver a vivir sus días como espía durante la Segunda Guerra Mundial
Joséphine rara vez estaba en el Castillo de Milandes durante la Segunda Guerra Mundial, aunque abrió su dominio para esconder judíos en ese momento. Fue reclutada como combatiente de la Resistencia, espiando para Francia. Era una candidata ideal para este puesto, ya que su trabajo la llevaba a viajar y a encontrarse con altos mandos nazis, proporcionándole información sensible que a menudo transmitía a través de códigos en sus partituras. Joséphine incluso actuó para las tropas aliadas en África del Norte, declarando: "Francia me hizo quien soy. Estoy lista para darle mi vida."
Sus esfuerzos para Francia fueron honrados con una Cruz de Guerra y una Legión de Honor, y gran parte de sus recuerdos de esta época están expuestos en el museo.
Recomendaciones y consejos
¿De vacaciones en Dordoña y fascinado por la impresionante Josephine Baker? Acérquese al Castillo de Milandes, en el Périgord Noir, en Castelnaud-la-Chapelle, a 16 km al sur de Sarlat La Cadéna. Por supuesto, siempre puedes llegar en coche, pero si vienes durante los meses de verano, no dudes en aprovechar la iniciativa de la región de Nouvelle-Aquitaine: crear líneas de transporte público que presten servicio a lugares turísticos como el Castillo de Milandes. Los bellos paisajes de los alrededores serán los primeros en agradecerlo. ¡La mejor manera de sumergirse entre la historia y la leyenda!
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