Trabajo, gato, niños... ¡abandonémoslo todo para vivir una escapada para enamorados! Saborearemos la vida palaciega en Place Vendôme. Nos daremos una vuelta por las bodegas en Champagne, los bouchons de Lyon, las tiendas de discos de Lille. En Deauville, nos subiremos a los escenarios antes de apostar fuerte en el casino. Las noches serán cortas, los desayunos interminables y las siestas, a la sombra de los parques, deliciosas.